¡Muy buenas, guardianes! Aquí vuestro humilde redactor Knoss, por fin desde mi casa en España. Los pasados días 5 y 6 de diciembre tuve el honor y la responsabilidad de haber asistido al evento PlayStation Experience que tuvo lugar en San Francisco, California.
Puesto que si he estado allí es gracias a los lectores y compañeros de Universo Destiny y a Activision, lo mínimo que os debía es un pequeño reportaje compartiendo mi experiencia con cuanta más gente mejor.
Ocurrió de un día para otro. Cristóbal se dirigió a mí preguntándome si sabría mantener una conversación fluida en inglés y si me importaría mucho perderme el Mangafest este año. Evidentemente al principio no tenía ni idea de lo que me quería decir, aunque no tardó en revelarme que Activision había invitado a alguien de Universo Destiny a nuestra elección para ir a la PSX ’15 y quería contar conmigo como posible candidato para ir. Nunca antes había ido a EEUU y lógicamente tuve que convencer a mi familia de lo buena que era esta oportunidad para poder ir. Una vez logrado, el resto se desarrolló solo: la jefa de relaciones públicas de Activision para España y Portugal, de nombre Mónica, se puso en contacto conmigo rápidamente para informarme de las cosas que necesitaba y acordar los horarios de los vuelos.
Prácticamente, no tuve que preocuparme de nada. Activision arregló cada detalle del viaje en seguida y yo sólo tuve que arreglar la documentación. El plan de viaje era encontrarme con Mónica en Madrid y volar hasta Londres, donde nos encontraríamos con el conocido youtuber Soki. Desde allí volaríamos juntos hasta San Francisco para estar a punto para el día 5.
El viaje sucedió sin complicaciones según lo planeado. Imagino que una buena parte de las personas que lean esto no habrán ido a EEUU antes, así que permitidme añadir que se hace no tanto difícil, sino más bien tedioso, entrar en ese país. Necesitas pagar un documento llamado ESTA en el que preguntan todos tus datos personales así como un cuestionario con preguntas del tipo «¿ha venido a matar a alguien? ¿ha venido a traficar con armas o estupefacientes? ¿alguna vez ha estado usted en EEUU más tiempo del que el Gobierno te permite?» y a dicho documento le sumamos otro que te piden rellenar en el propio avión en el que debes indicar cuánto dinero piensas dejar (con ventas) en EEUU, si traes especies animales o vegetales, y ese tipo de cosas. Aunque a priori esas preguntas me parecieron hasta cierto punto exageradas, lo cierto es que son hasta poco comparado con lo que encontré en el aeropuerto –un sólido control de todo el que entraba en territorio norteamericano en el que te toman todas las huellas dactilares, fotos de tu cara y te preguntan cosas como «¿a qué has venido? ¿cuándo te vas? ¿dónde te alojas?» Me parece una normativa respetable, pero no del todo comprensible: si acabo de bajarme de un avión, han comprobado ya sobradamente que no soy un tipo peligroso. Pero bueno, a fin de cuentas no es mucho más que una anécdota curiosa que quería compartir.
Cuando pasamos los controles del aeropuerto nos encontramos con un chófer de Activision que nos llevó hasta el hotel. El trayecto se nos hizo ameno porque contrastábamos culturas y hablábamos de videojuegos. Con las maletas ya en el suelo, en mi mente estaba ilusionado por las cosas que vería al día siguiente y la gente que conocería. Pero los sucesos acontecieron antes de lo esperado, y es que en el propio hall del hotel vi delante de mis narices a la tropa conjunta de Bungie, que se alojaba en el mismo edificio. Yo estaba atónito por tener delante a los héroes de mi infancia (llevo jugando a juegos de Bungie desde hace mucho, antes incluso que de Halo) en un círculo, charlando. Eric ‘Urk’ Osbourne reconoció de inmediato a la chica de Activision, le recibió con dos besos y nos presentaron. También a David ‘DeeJ’ Dague, a quien pocos días más tarde pude entrevistar, y quien además no dudó en indicarnos la dirección del bar al que iban a tomar algo añadiendo además una cortés invitación para unirnos a ellos.
Desgraciadamente tuvimos que rechazar la oferta, ya que no habíamos cenado aún y tampoco habíamos recogido nuestros pases para entrar en la PlayStation Experience. Hicimos bien en ir esa noche, ya que por la mañana el evento estaba abarrotado y nos hubiéramos perdido la conferencia por no poder coger asientos a tiempo. Soki, Mónica y yo acordamos guardar las maletas y regresar para cenar juntos, momento en el cual me crucé con DattoDoesDestiny para tomar el ascensor. Evidentemente, le pedí una foto.
La comida en San Francisco está genial. El mítico desayuno americano del que todos hemos oído hablar –huevos fritos, bacon, patatas, sandwich, zumo de naranja y un café– sienta muy bien y verdaderamente aporta energías de sobra para empezar bien el día. Probadlo cuando podáis. Lo que no os recomiendo tan encarecidamente es que hagáis como mi compañero de viaje y os pidáis además una hamburguesa, porque Mónica y yo intentamos añadir en algún momento un bol de fruta con cereales y yogur y honestamente no pudimos terminarlo y no tuvimos más hambre hasta la cena.
Después de retirar nuestros pases y cenar nos fuimos a dormir. El hotel era bastante grande y lujoso y me tocó la habitación más grande de las tres. El servicio y la atención fueron positivas, aunque eso importa más bien poco. Al día siguiente decidimos quedar para desayunar e irnos juntos al Moscone West Center, a apenas dos minutos a pie desde el hotel, donde se celebra el evento.
Ocupamos nuestros asientos en el salón de la conferencia casi al final pese a que llegamos con bastante antelación, y allí nos encontramos algunos periodistas de revistas españolas. El show comenzó a las 10:00am. Probablemente ya hayas visto la conferencia, pero si no es el caso te la dejamos aquí para que saques tus propias conclusiones.
[ytp_video source=»nCuMLqEiiws»]
Desde que acabó el evento hasta la tarde, tuvimos bastante libertad. Entramos en las dos grandes salas del edificio donde se podían ver los stands de videojuegos. Los más grandes (Dark Souls III, Uncharted 4, Battleborn, Street Fighter V…) colapsaban la atención de los juegos independientes, y puesto que no me encontraba con ganas de hacer grandes colas, me fijé en aquellos juegos indie que probablemente me cueste más encontrar y probar en el futuro. A nuestro pequeño grupo español nos gustó en particular un juego que ni siquiera recuerdo que fuese anunciado durante la conferencia, de nombre Gang Monsters. Un pequeño juego con modo competitivo para 4 jugadores locales en el que controlamos simpáticos monigotes que se golpean y se arrastran para tirarse unos a otros del escenario, por así decirlo una versión cómica de Smash Bros basado en físicas.
En cualquier caso, mis compañeros abandonaron el lugar para atender bandejas de correo electrónico y las demandas del canal de Youtube respectivamente, mientras que yo me quedé para probar Destiny en su stand. Realmente tenía una invitación especial para jugarlo y grabarlo aquella noche allí mismo, pero quería adelantarme impacientemente a los hechos y probarlo en calidad de visitante. La cola era enorme, pero entrábamos de seis en seis y no tardé en posar mi trasero delante de una pantalla.
La experiencia era intensa y divertida y no podía esperar a la noche para jugar más. Después de presentarme a Derek Carroll y algunos youtubers, me dediqué a escribir hasta el anochecer. Ni más ni menos, a las 20:30 teníamos una sesión privada con Bungie a la que asistimos Soki y yo además de un puñado de conocidos youtubers internacionales. Había un servicio de catering, de modo que pudimos degustar comida y bebida gratis mientras jugábamos las recién anunciadas Carreras de Colibríes. Suena bien, ¿verdad? ¡Sabía mejor! Era curioso cuanto menos ver a Mr Fruit sentado a tu lado comiendo pollo durante las pantallas de carga, y también sentaba bien la idea de tener a gurús del videojuego de la talla de Derek Carroll o Jerry Hook mirando tu pantalla, preguntándote si te estabas divirtiendo y qué te parecían, mientras otros comentaban impresiones del evento o de sus vidas.
He de reconocer que tuve bastantes fallos durante el evento y que afectaban seriamente a la responsabilidad que llevaba sobre mis hombros y que implicaron, entre otras cosas, que un gameplay de cerca de una hora de duración que mostraba varias carreras saliese algo más tarde de lo que pensaba y encima, corrupto. Por suerte, Soki y mi fiel compañero Virtualete de Universo Destiny pudieron solucionar estos problemas.
Sin duda ha sido una experiencia agotadora, pero muy nutritiva (en varios sentidos) y espero haber sido capaz de transmitiros al menos un 1% de todo lo que viví en tierras americanas durante tres días. Si eso ocurre, y os ha gustado, entonces tendré motivos de sobra para volver en algún otro momento y traer más y mejor. ¡Un fuerte abrazo, guardianes!
Mola… la próxima si queréis me avisáis a mí 😛 Fuera de coñas, estupenda experiencia.
Wow muchas felicidades a Universo Destiny y a Knoss por esa experiencia y al ser invitados por activision en persona eso habla del gran trabajo que han hecho.
MMMMmmm… Pancakeeees =- w-=
Muchas felicidades, y se agradece todo el trabajo (si asi se podria llamar al ir a una convencion internacional ALL FREE :razz:) que haces (Y)…
Grandísimo reportaje knoss 🙂 y que envidia Jaja tendrías que haber secuestrado a deej y pedir recompensa por el rescate, unos cuantos lúmenes Jaja saludos guardianes